Qué es un plan general de contabilidad y qué partes tiene
Todos los negocios deben llevar una contabilidad. Porque es la única manera de controlar y registrar tanto sus gastos e ingresos como otras operaciones que realicen. Pero la contabilidad no se puede hacer de manera libre. Es decir, tiene que seguir una normativa única, cuyas directrices definen qué es un plan general de contabilidad.
Qué es un plan general de contabilidad
Consiste en un documento que compila las normas a través de las cuales las empresas deben realizar y presentar sus cuentas anuales. Como tiene valor legal, es de obligado cumplimiento por parte de cualquier tipo de entidad que desarrolle actividades económicas.
El objetivo del plan general de contabilidad es el de conciliar los diferentes sistemas contables europeos. Así, todas las empresas de la UE presentarán sus datos económico-financieros de manera unificada. Además, permite disponer a los organismos de control de una información clara y fiable respecto a sus actividades.
España, por supuesto, también aprobó esta medida mediante el Real Decreto 1514/2007 de 16 de noviembre. Puedes consultar su contenido en este enlace. Y, si quieres saber qué organismo se encarga de actualizar el plan general de contabilidad en nuestro país, se trata del Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas.
Partes del plan general de contabilidad
El plan general de contabilidad consta de cinco partes, pero solo las tres primeras tienen carácter obligatorio. Sin embargo, a pesar de la voluntariedad de las dos últimas, suelen ser las más comunes para las empresas. Porque les sirven de gran ayuda para su trabajo.
Marco Conceptual
Aquí aparecerán las nociones básicas de la contabilidad, además de todo tipo de pautas, principios o criterios que se emplean en el proceso de elaboración de los documentos contables.
En resumen, se trata de un apartado de contenido teórico. No obstante, establece un criterio fijo para que las empresas sigan las mismas pautas cuando realicen su contabilidad.
Normas de Registro y Valoración
Al igual que el apartado anterior y el que viene a continuación, es obligatorio cumplimentarlo. Porque su función es la de desarrollar los principios contables y disposiciones que aparecen en la primera parte. Así que, también consiste en un apartado teórico.
Las normas a las que se refiere el titular son 23, divididas entre asuntos relativos a la contabilidad y a los registros monetizados. Por lo tanto, garantiza que la información que ofrezcan las empresas sea fiable, objetiva y comparable.
Cuentas Anuales
También de contenido eminentemente teórico, este apartado recoge las directrices a seguir cuando se presenten las cuentas anuales. Si hablamos de España en concreto, se debe entregar cada año en el Registro Mercantil.
Si te interesa conocer los elementos afectados por esta normativa, los puedes ver a continuación:
Estado de Flujos de Efectivo
Cuenta de pérdidas y ganancias
Balance de situación
Memoria anual
Estado de cambios en el patrimonio neto
Cuadro de Cuentas
Aquí tienen que figurar todos los elementos específicos con los que opere la contabilidad, aunque recuerda que este apartado es voluntario. En total, consta de 9 grupos, pero separados entre cuentas patrimoniales y cuentas de gestión.
Las patrimoniales constituyen las primeras cinco categorías, donde cada una cuenta con sus respectivos subapartados:
Financiación básica
Inmovilizado
Existencias
Acreedores y deudores por operaciones comerciales
Cuentas financieras
Por otro lado, las cuentas de gestión representan los cuatro últimos grupos, que también se dividen en varias partes:
Compras y gastos
Ventas e ingresos
Gastos imputados al patrimonio neto
Ingresos imputados al patrimonio neto
Definiciones y Relaciones Contables
Aunque su función es meramente informativa, permite explicar el movimiento de abonos en las cuentas. Es decir, que ofrece datos sobre las cuentas empleadas tanto en el balance y cuenta de pérdidas y ganancias como en el estado de cambios del patrimonio neto.
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